sábado, 8 de julio de 2017

El momento en que John Lennon nació de nuevo


¿Un John Lennon cristiano y asiduo seguidor del Club 700? ¿Sucedió eso alguna vez? El periodista y escritor británico Steve Turner indaga una de las facetas más desconocidas del ex beatle. Este es un relato asombroso centrado en  1977, año en el que Lennon recluido en su hogar, fuera del mundillo musical y del ojo del público; hacía las veces de “amo de casa”. Un texto apasionante y polémico que vale la pena leer…

"¿Puede el señor amarme?", preguntó el ex Beatle a Oral Roberts. "Quiero salir del infierno"

Este texto forma parte del libro El Evangelio de Acuerdo a los Beatles, de Steve Turner.

En marzo de 1977 Yoko Ono viajó con John Green a Cartagena, Colombia para encontrarse con alguien "que podría hacer algo al respecto (para mantener lejos a la mala suerte)." Green tuvo que acompañarla para constatar la veracidad de esta supuesta nueva bruja. Yoko le pagó a la bruja seis mil dólares para que realice una serie de rituales que culminaron con el sacrificio de una paloma. De vuelta a New York; Yoko le insistió a Green en que tenían que volar vía Los Angeles y Alaska para así evitar hacer un vuelo direccional porque, según Yoko, eso traía mala suerte.

Luego llegó una de las más extraordinarias transformaciones en la vida de John Lennon. John era, lo que podríamos decir, un adicto a la TV. Esta era su forma preferida de mirar al mundo desde que se había convertido en una celebridad y no podía caminar en forma anónima por ningún lugar. 

A Lennon le gustaba ver los programas de algunos de los más conocidos pastores evangelistas norteamericanos como Pat Roberts, Billy Graham, Jim Bakker y Oral Roberts. En 1972 Lennon le había escrito una carta desesperada a Roberts confesándole su dependencia a las drogas y sus temores de enfrentar a sus "problemas vitales y de fe". En la carta, John confesó estar arrepentido de haber dicho, durante la época en que formaba parte de los Beatles, que eran "más populares que Jesús", a la vez que adjuntaba un regalo para la Universidad Oral Roberts (N del t: En esa Universidad se "graduó" Ned Flanders!!). Luego de citar la línea "el dinero no puede comprarme amor", del tema "Can't Buy Me Love", Lennon decía, en la misma carta, "Eso es verdad. “El punto es este: quiero felicidad. No quiero seguir con las drogas. Paul me dijo una vez: “Ustedes se burlaban de mí por tomar drogas, pero se van a arrepentir al final.” Explíqueme que puede hacer el cristianismo por mí. ¿Es una farsa? ¿Puede Jesús amarme? Quiero salir de este infierno".
 
Luego de leer la carta, Roberts le envió a John una copia de su libro El Milagro de Sembrar la Fe y varias cartas explicándole cuestiones acerca de las creencias cristianas básicas. En la segunda de sus cartas, Roberts le decía: "John, yo te vi a vos y a los Beatles en televisión la primera vez que ustedes vinieron a EEUU. El talento musical de tu grupo era muy grande. Por eso, al ser tan populares, su música tocó a millones de personas. Por consiguiente, tu influencia y poder empezó a aumentar y por eso tu famosa frase de que los Beatles "eran más populares que Jesús" puede que tuviera algo de veracidad en aquel momento. Pero, como vos sabés, nuestro señor dijo: "Yo he vivido por siempre. Gente, la Biblia dice, ustedes son como ovejas e inconstantes, persiguiendo un ideal un día y otro diferente al día siguiente". Sin embargo, hay millones de personas que han recibido a Jesucristo como su salvador y por eso se sienten llenos con el Espíritu Santo. Estas personas aman a nuestro señor. Para ellos, él es el más maravilloso y popular hombre que ha vivido jamás porque él es el Hijo de Dios. Doy gracias al señor de que tú, John, veas esto y, finalmente, te arrepientas dándote cuenta que ningún grupo o persona puede ser "más grande que Jesús". Jesús es lo único real. Como él dijo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida". Por eso, como ves, tu famosa frase fue consecuencia de que vos nunca habías buscado acercarte a nuestro Señor. Lo que quiero decir, como traté de explicarte en la otra carta, es que Jesús es la única verdad, no es muy difícil darse cuenta de eso. Él dijo: "Ven a mí y yo te daré el resto. Para mi rebaño la carga es liviana". Vos decís, John, que tomás drogas porque la realidad te asusta. Recordá que cuando abras tu vida a Jesús, él te quitará todos tus temores y te dará paz".


Sin embargo, esta correspondencia y el ver programas de TV evangelistas no parecieron surtir ningún efecto en la vida de Lennon. Hasta que, de repente, le anunció a sus amigos cercanos, en la primavera (boreal) de 1977, que había “nacido de nuevo como cristiano". John se había sentido particularmente movilizado por el estreno en la televisión norteamericana del film Jesús de Nazareth, de Franco Zeffirelli, protagonizado por Robert Powell, en el papel de Jesús. La cadena NBC había pasado la miniserie en dos segmentos de tres horas de duración, durante el Domingo de Ramos, el 3 de abril de 1977. Una semana después de ver la película, Lennon asistió a un servicio religioso el domingo de Pascua con su esposa Yoko Ono y su hijo Sean.

Durante los siguientes meses, Lennon desconcertó a sus conocidos con sus constantes alabanzas a "nuestro Señor", escribiendo canciones cristianas con títulos como "Hablando como Jesús" o "Amén", y tratando de convertir a los no creyentes al cristianismo. Incluso llamó a la línea de oración del Club 700, el famoso programa de Pat Robertson. Este cambio en la vida de Lennon perturbó a Yoko, quién trató de persuadir a John para que deje de actuar de esta manera. Ella le recordó lo que él había dicho, en el pasado, criticando a los líderes religiosos por no poseer fundamentos sólidos sobre su fe y debido a la cursilería emocional en la que éstos se refugiaban para manipular a los creyentes. Yoko sabía que si la prensa se enteraba del renacer espiritual de Lennon se armaría un gran revuelo acerca del nuevo giro que había tomado la relación de John con Jesús. Sin embargo, John la confrontó, acusándola por haber utilizado magia negra y diciéndole que ella "no podía ver la verdad porque sus ojos estaban cegados por Satanás". Sin embargo, los conocidos de la pareja se daban cuenta que el real motivo de las preocupaciones de Yoko era que ella creía que estaba perdiendo su control sobre la vida de John. Si él se convertía en un seguidor de Jesús no dependería más de ella ni de la magia negra y los ocultistas. Quizá debido a esto, durante las largas y apasionadas discusiones de la pareja, ella atacó los puntos endebles y sobreactuados de la nueva fe de John. Más tarde, ellos conocieron a una pareja de misioneros noruegos con los que Yoko discutió fuertemente acerca de la divinidad de Cristo, sabiendo que esta cualidad había sido siempre lo más difícil de aceptar por parte de John. Como las argumentaciones de los misioneros había sido tan astutamente refutadas por Yoko, John comenzó a dudar acerca de su nuevo compromiso religioso.

En una canción inédita llamada "Vos Salvaste mi Alma", Lennon hablaba acerca de haber estado "cerca de caer" debido a las oraciones de un pastor evangelista de la TV, mientras se sentía "solo y asustado" en un hotel en Tokio. Esta canción debe hacer referencia a un viaje a Japón, que la pareja realizó a fines de mayo de 1977, cuando John estuvo en el Okura Hotel por más de dos meses, mientras Yoko visitaba familiares. Sintiéndose aislado debido a la barrera idiomática, él se encerró en su habitación por largos periodos de tiempo. Durante las noches, John sufría terribles pesadillas. De acuerdo a John Green, quién no hace mención del renacimiento espiritual de Lennon en su libro, John le dijo que "estaba tirado todo el día en su cama [en Tokio]. No hablaba, no comía... De repente, algo raro pasó. Comencé a ver todas estas diferentes partes mías. Me sentía como un templo oculto lleno con muchos espíritus. Cada uno de ellos pasando a través mío, habitándome por poco tiempo y luego siendo reemplazado por otro." Esta imagen relatada por Lennon es extraordinariamente parecida a una atribuida a Jesús y citada en Lucas 11. No es difícil imaginar que John conocía este pasaje del Nuevo Testamento. En él, Jesús advierte de la necesidad de desembarazarse de los malos espíritus: "Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, anda por lugares secos, buscando reposo; y no hallándolo dice: "Volveré a mi casa de donde salí." Y cuando llega, la encuentra barrida y adornada. Entonces va, y toma a otros siete espíritus peores que él; y entrados, moran allí; y el postrer estado de aquel hombre viene a ser peor que el primero."

Cualquier cosa sea la que le haya ocurrido en Tokio, esto marcó el final del interés de Lennon en la figura de Jesús. Su canción "You Saved My Soul" lo dejaba en claro. La letra narraba que John había estado "cerca de caer" debido a los dichos de un predicador de la TV, pero que Yoko lo había salvado de ese "suicidio". Por lo tanto, la "salvación" del título hacía referencia a ser salvado de Dios, no por Dios. Yoko se había convertido, una vez más, en la única dueña del alma de John.

Sin embargo, la vida del ex beatle no mejoró. Lennon cayó en la depresión. Creía que la creatividad lo había abandonado y que ya no tenía un real propósito para seguir viviendo. Los únicos momentos de felicidad en la vida de John eran los que compartía junto a su hijo, Sean. Lennon sentía que su vida estaba fuera de control. Le preocupaba su salud, en especial su vista. Se la pasaba invirtiendo dinero en medicina prepaga. Pero la única salida que veía a su desesperada situación, era pagarle a gente que decía que era capaz de "ver el futuro". De cualquier forma, ¿en quién podría confiar? Si el consejo del tarotista contradecía al del astrólogo, ¿a quién podría él seguir? A pesar de la libertad que Lennon buscó cuando separó a los Beatles, ahora se sentía completamente esclavizado. No podía viajar a ningún lado sin el consejo de un direccionalista. Tampoco podía firmar contratos con nadie sin tener en cuenta a los astros o hacer planes para el futuro sin consultar el I Ching.


En enero de 1979 John y Yoko viajaron a El Cairo, al haber oído acerca de que estaba teniendo lugar una excavación arqueológica ilícita. Ellos creían que los amuletos egipcios antiguos contenían poderes mágicos. Por eso Yoko había destinado una de las habitaciones de su departamento para albergar a algunos de estos elementos egipcios. "Yo amo el arte egipcio", decía Yoko. "Me preocupo por conseguir antigüedades egipcias. No por su valor monetario sino por su magia. Cada pieza tiene un cierto poder mágico." Así John y Yoko se establecieron en el hotel Hilton del Río Nilo y luego viajaron hacia las pirámides, pero cuando se hicieron públicas sus intenciones fueron prevenidos de que no se acercaran a las excavaciones.


En febrero de 1979, Frederic Seaman se convirtió en el asistente personal de John. De acuerdo a Seaman, los intereses principales de Lennon eran leer libros de religión, fenómenos psíquicos, ocultismo, muerte, historia, arqueología y antropología. Algunos de los libros específicos que Seaman recuerda haber comprado para John durante ese tiempo fueron: Alma Rebelde: Un Antiguo Dialogo Egipcio entre un Hombre y su Destino, de Bika Reed; Drawing Down the Moon: Witches, Druids, Goddess Worshippers, and Other Pagans in America Today, de Margot Adler; y Practical Occultism, de (Madame) H. P Blavatsky.

Vacacionando en Florida, durante la primavera (boreal) de 1979, Lennon vio otra vez Jesús de Nazareth, durante su emisión anual de Pascuas, pero su reacción fue completamente diferente de la que había tenido dos años atrás. Lennon se la pasó durante toda la emisión del programa, bromeando acerca de que sería mejor que los de la cadena televisiva avanzaran directo hasta la parte de la crucifixión porque el film era "un bodrio". Seaman, quién estaba presente junto a John y sus hijos, Sean y Julian, en esa oportunidad, recordó que "John comenzó una crítica mordaz en contra del Cristianismo, acusándolo de virtualmente destruir lo poco que quedaba de la cultura pagana y la espiritualidad en Europa, y la gran perdida que esto le había causado a la civilización". Luego, según Seaman, Lennon dijo que sentía que "había renacido como pagano".

No mucho tiempo después, también en 1979, Bob Dylan editó Slow Train Coming, su primer álbum evangelista inspirado en su personal experiencia de haberse convertido del judaísmo al cristianismo. Dylan le contó al periodista Robert Hilburn, de Los Angeles Times, que había aceptado que "Jesús era real: Yo tengo esta visión y este sentimiento. En verdad siento que he nacido de nuevo, si quieres llamarlo así. Ya sé que es una definición muy vieja. Pero esto es algo con lo que la gente puede relacionarse." Hilburn le preguntó a Dylan que significaba "nacer de nuevo". "Nacer una vez," respondió, "es nacer de un espíritu inferior. Este es el espíritu con el que cada uno de nosotros nace. Nacer de nuevo es nacer con el espíritu "de arriba" (sic), lo cual es un poco diferente." Slow Train Coming era un álbum directo y desafiante. A diferencia de la mayoría de los discos "góspel", no sólo alababa a Jesús sino que también atacaba a quienes se oponían a reconocerlo como su salvador, ya fueran falsos profetas o carentes de compromiso. Estaba dirigido a gente como John. En "Precious Angel," el primer single, Dylan cantaba: "Unos y otros tienen fe o no la tienen, no hay un término medio". Mientras que la letra de la canción que le daba título al álbum hablaba de "tontos glorificándose a sí mismos, penosamente manipulados por Satanás".

La transformación de Dylan tomó a John por sorpresa. Después de todo, Dylan había sido para los Beatles casi como el único músico de su generación al que consideraban "un igual" en trascendencia y al que admiraban profundamente. Pero lo que en verdad era humillante era que Dylan se sentía feliz y seguro con su nueva fe religiosa, cantando acerca de todo aquello a lo que John había querido eludir. Dylan parecía estar seguro de que todos sus pecados habían sido perdonados y que Dios estaba de su lado. Cuando se le preguntó en 1980 acerca de la conversión de Dylan, John dijo que estaba sorprendido de que "el viejo Bobby haya tomado ese camino," pero agregó que "si él lo necesitaba, déjenlo que lo haga." Su única objeción, dijo, "era que Dylan presentaba a Cristo como el único camino". Lennon no estaba de acuerdo con esto porque "(para mí) no hay una única respuesta para todo". Esto era por lo que John decía preferir a los budistas. Estos no hacían, según Lennon, "proselitismo religioso". En lo que ahora podemos ver como una alusión a su propio periodo de haber "nacido de nuevo", el cual no había sido hecho público, John decía: "De cualquier forma lo entiendo. Yo comprendo completamente por lo que Dylan está pasando, porque también tuve miedo (como) de quedarme encerrado dentro de algo religioso."

Sin embargo, en verdad, los sentimientos íntimos de Lennon acerca de conversión de Dylan se vieron reflejados sólo en la composición de un nuevo tema satírico. John había quedado particularmente sensibilizado por el tema de Dylan "Gotta Serve Somebody" ("Tienes que servir a alguien") porque éste se oponía a la idea lennoniana de que no había una única verdad. La canción decía, tan bruscamente como era posible, que cualquiera sea el lugar de la vida en el que tu estés, debes elegir entre servir a Dios o al Diablo. Esta no era una opción que pudiera ser evitada. Lennon se sintió tocado por este tema e incluso llegó a burlarse de Dylan, en un reportaje, diciendo que si quería servir a alguien "que se hiciera camarero". Incluso, luego escribió, en respuesta al tema de Dylan, una canción satírica (que apareció, en forma póstuma, en The Lennon Anthology) llamada "Serve Yourself" ("Sírvete a ti mismo") argumentando que "nadie puede salvarte". La única persona a la que tienes que servir es a ti mismo. 


"John estaba algo preocupado [con la canción de Dylan] por eso esto fue casi como un diálogo", dijo Yoko en 1998. "John mostró su ira pero también su sentido del humor."


Fragmento de El Evangelio de Acuerdo a los Beatles, de Steve Turner, publicado por Westminster John Knox Press, 2006.

Traducido por E. Acevedo

 

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